Nombre: Yair, Edad: 9 Años
La magia del deseo de Yair comenzó desde el primer día que lo conocimos en la primera salida, lo llevamos a él junto con sus papás y hermanos a pasar una tarde de juegos a el Dorado Park, donde nos divertimos todos demasiado y tuvimos un momento increíble para conocerlo, no nos fuimos hasta que Yair no se subió a todos los juegos que quiso para ir a comer al “Restaurante el Canda” donde ya nos estaban esperando con platillos especiales para él y aprovechamos para sacar información para el deseo.
En nuestra segunda salida fuimos a McDonalds, donde no solo comió y convivió si no también pasó a la cocina a cocinar su propia hamburguesa junto con todo el equipo de McDonalds que le dieron un recibimiento muy especial, jugamos muchos juegos de mesa y nos reímos montones, ahí concluimos todas nuestras ideas para el súper deseo que se venía.
La magia comenzó desde el primer momento en que nos reencontramos con Yair para el deseo después de las dos súper salidas que tuvimos con él, lo recibimos con globos y pancarta en el hotel “AC Marriot”, donde fue el punto de reunión para de ahí irnos todos juntos a la primera parada del deseo, fuimos a desayunar al restaurante “Café Café” donde ya nos esperaban con todo el desayuno listo, todo lo que Yair quisiera pedir, aprovechamos los juegos del establecimiento para divertimos un rato y romper el hielo. Ahí se le hizo entrega de la primera pista que era un cartel con el símbolo paramédico, Yair ya sospechaba de lo que se trataría la siguiente actividad y así fue cómo nos dirigimos hacia las instalaciones de La Cruz Roja Mexicana, para tomar su capacitación como paramédico, lo que Yair no sabía era que todo el día 1 del deseo era un entrenamiento para lo que se venía al día siguiente. Los paramédicos lo recibieron increíble y lo súper capacitaron con los métodos de primeros auxilios, al finalizar le entregaron su diploma oficial entre otros regalos. Después fuimos de vuelta al hotel donde ya estaba preparado en la terraza un campo de batalla, ya que ahora seguía el entrenamiento de “armas” con pistolas de agua y globos hicimos guerra de agua.
Al finalizar el entrenamiento comimos todos juntos para celebrar que ya habíamos avanzado mucho en el entrenamiento en el transcurso del día.Para casi finalizar el día 1, decidimos llevar a Yair a pasar una tarde de boliche con todo el equipo, la pasamos increíble, y ahora si para finalizar el día al regresar al hotel nos esperaban con un salón acondicionado como nuestro cine privado, para poder ver películas y comer palomitas y sushi, eso fue todo el primer día y Yair se fue a dormir para lo que le esperaba al siguiente día. En el segundo día tuvimos un desayuno delicioso en el mismo hotel, para después partir hacia la sorpresa más grande del deseo, para lo que tanto entrenamos el día anterior.
Yair había sido solicitado por la fuerza naval de Veracruz para una misión como rescatista, fue recibido por toda la marina en sus camionetas en las mismas instalaciones de ellos, toda una ceremonia para entregarle su traje oficial de marino, y comenzó la aventura. Llevaron a un oficial herido en la ambulancia dando los primeros auxilios que ya Yair se había capacitado el día anterior, después lo subieron a un helicóptero, en donde dieron varias vueltas con Yair como piloto, todo esto fue en realidad increíble de creer hasta para los miembros del equipo voluntario. Al finalizar la misión fue recibido con honores y con un diploma oficial de la marina. Y hubo una pequeña recepción para festejar con los marinos.Para finalizar el día y el deseo, no dejamos pasar desapercibido el cumpleaños que ya se acercaba de Yair, por lo que le hicimos una piñata como fiesta de graduación de todo lo aprendido durante el deseo, con dulces, piñata y regalos.Definitivamente Yair nos enseñas más a nosotros que nosotros a él durante su deseo.